Los recursos de petróleo y gas de Senegal son una parte crucial en la economía del país y su desarrollo futuro. Aunque Senegal aún no figura entre los diez principales productores de petróleo y gas del continente africano, su potencial y continuo desarrollo podrían cambiar esta situación en los próximos años.
Principalmente, Senegal cuenta con seis bloques offshore para la exploración y explotación de petróleo y gas.
A continuación analizaremos algunos de estos bloques:
Bloque offshore St. Louis: Este bloque se encuentra en la plataforma de aguas profundas entre Mauritania y Senegal y en él se está desarrollando actualmente la primera fase del proyecto “Gran Tortue Ahmeyim” (GTA). Dicho proyecto es operado por British Petroleum y se estima que los recursos totales de gas en el campo son alrededor de 15 trillones de pies cúbicos (TCF). Se prevé que el primer barril de gas se obtenga a mediados de Noviembre de 2024.
Bloque Offshore SANGOMAR: Este bloque, descubierto en 2014, se encuentra en la región de Rufisque, a 100 km al sur de Dakar. Se estima que contiene 630 millones de barriles de petróleo y 4 trillones de pies cúbicos de gas (TCF). En él se está desarrollando el proyecto ´Sangomar ´, el cual acaba de finalizar su primera fase y ya ha comercializado el primer barril de petróleo el pasado mes de junio de 2024 y se espera que el primer barril de gas se comercialice en octubre de 2024.
Bloque offshore CAYAR: Este bloque se ubica en la plataforma de aguas profundas frente a la costa de Senegal. En él se encuentran los campos Yakaar - Teranga. En estos proyectos se estima una reserva total de 20 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas.
El proyecto Yakaar – Teranga aún se encuentra en fase de exploración, aunque se prevé que su explotación comience en 2026.
En resumen, el sector de hidrocarburos, que se estima tendrá una capacidad total de producción de 39 trillones de pies cúbicos (TCF), podría convertir a Senegal en el quinto país de África en cuanto a reservas gasísticas. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), este sector representará aproximadamente el 5% del Producto Interior Bruto (PIB) entre 2025 y 2040. Además, se espera que contribuya con 700.000 millones de FCFA a las arcas del estado, según el Ministerio de Finanzas de Senegal.
Actualmente, Senegal es un país altamente dependiente de las importaciones de petróleo crudo y productos derivados del mismo. El 55% del total de la producción energética se genera a partir del petróleo. Sin embargo, los recientes hallazgos podrían contribuir a avanzar la economía senegalesa en la senda de alcanzar los objetivos del Plan Senegal Emergente (PSE) para 2035.
La industria del petróleo y gas en Senegal no solo representa una fuente adicional de ingresos, sino también una oportunidad para diversificar la economía más allá de los sectores tradicionales como la agricultura y la pesca. Además, atrae inversiones extranjeras y fomenta la transferencia tecnológica. A medida que se desarrollan las infraestructuras necesarias para la explotación de estos recursos, también se mejorará la conectividad y la logística del país.
Sin embargo, no podemos ignorar los desafíos que enfrenta este sector y, por ende, el país. Los retrasos en la producción son habituales en la industria y pueden afectar los ingresos esperados y la planificación financiera, por lo que es fundamental gestionar eficientemente los proyectos para evitar demoras significativas.
La volatilidad de los precios del petróleo y gas puede tener un impacto significativo en los ingresos del país, Senegal debe prepararse para escenarios tanto de precios altos como bajos
Existe el riesgo de que las expectativas sobre los ingresos y beneficios del sector sean demasiado altas, esto podría generar presión política para un alto nivel de gasto, lo que no sería sostenible a largo plazo.
Aunque los proyectos gas-to-power ofrecen ventajas en términos de energía más limpia y accesible, también existe el riesgo de quedar atrapado en contratos de gas a largo plazo que podrían afectar la sostenibilidad fiscal.
La gestión ambiental en la explotación y producción de hidrocarburos es crucial, se deben minimizar los impactos negativos en el entorno natural y las comunidades locales.
Las comunidades cercanas a los proyectos petroleros y gasíferos deben estar involucradas y recibir beneficios tangibles., la consulta y el diálogo son esenciales para evitar conflictos y promover la aceptación social.
A pesar del potencial del petróleo y el gas, Senegal debe seguir invirtiendo en fuentes de energía renovable, la diversificación energética garantiza la resiliencia y la sostenibilidad del sector.
Por último, Senegal debe garantizar una sólida gobernanza y transparencia en la gestión de los ingresos y contratos, esto ayudará a prevenir la corrupción en el sector.
En definitiva, abordar estratégicamente estos desafíos permitirá a Senegal aprovechar al máximo los beneficios del sector del petróleo y gas mientras garantiza un desarrollo sostenible y responsable. El equilibrio entre crecimiento económico y preservación ambiental es fundamental para el futuro del país.
Autor artículo: Enrique Agudo (SUPERMARITIME)